Xalapa, Ver.- En la temporada de calor existen riesgos para la salud asociados con la exposición a las altas temperaturas, como deshidratación, golpe de calor y quemaduras solares, por lo que la Secretaría de Salud (SS) hace un exhorto a la población para que tome las medidas preventivas conducentes, a efecto de disminuir el peligro de adquirir padecimientos de este tipo.
El agotamiento y golpe de calor ocurren cuando, por exposición a éste, el organismo es incapaz de disiparlo, ocasionando un aumento de la temperatura corporal que afecta a varios órganos. Los síntomas pueden ser temperatura corporal de 40 grados o más, piel caliente, seca y enrojecida, dolor de cabeza, fatiga, sed, náuseas, vómito, mucosas secas, confusión mental, somnolencia, espasmos musculares, convulsiones y pérdida de la conciencia.
Ante ello se debe actuar con rapidez para que el agotamiento no evolucione a golpe de calor. Mientras se traslada a la persona a alguna unidad médica cercana, se recomienda conducirla a un lugar freso, que haya sombra, descubrir o aflojar la ropa, aplicar compresas frías en cabeza, cuello, tórax, brazos y muslos; si tolera la vía oral, dar a beber líquidos, de ser posible utilizar electrolitos orales.
Por otra parte, las enfermedades diarreicas agudas, incluyendo cólera, si bien no son exclusivas de la temporada de calor, pueden incrementarse por la mayor rapidez en la descomposición de los alimentos, o por el consumo de alimentos en riesgo.
Para evitar efectos a la salud por la exposición al calor natural extremo, se sugiere permanecer a la intemperie antes del mediodía o al atardecer, tomar muchos líquidos (sin alcohol) y no esperar hasta estar sediento para beberlos.
También reducir el ejercicio y, si se tiene que realizar, ingerir de dos a cuatro vasos de líquidos frescos cada hora, descansar frecuentemente en la sombra, utilizar sombrero de ala ancha para protegerse del sol, usar ropa de preferencia ligera, holgada, de algodón y colores claros, además de protector solar, y evitar dejar a alguien dentro de un vehículo estacionado y cerrado.
Las personas que tienen mayor riesgo de sufrir un padecimiento relacionado con el calor son los niños menores de cinco años, adultos de 65 años o más, personas con alguna enfermedad mental y pacientes hipertensos o que padecen del corazón.
En cuanto a la prevención de la diarrea, se aconseja dar sólo pecho materno durante los primeros cuatro a seis meses de vida, después de esa edad, incluir otro tipo de alimento; utilizar biberón, ingerir los alimentos inmediatamente después de ser preparados (cuando no sea posible, mantenerlos en refrigeración); no consumir comida preparada en la calle y en condiciones higiénicas inadecuadas; lavar las manos antes de cocinar, después de ir al baño o cambiar un pañal; lavar y desinfectar frutas y verduras, comer pescados y mariscos bien cocidos o fritos, beber agua hervida, clorada o desinfectada con plata coloidal, y tomar Vida Suero Oral en caso de enfermarse, así como acudir al médico.
Fuente: Comunicación Social estatal/pmc